Es un queque húmedo, sabroso y una muy buena forma de darles vegetales escondidos a los niños. Se lo comen felices.
No se deje engañar por la corteza del trozo de la foto, se ve resquebrajada y seca, pero no lo está. De echo, me llamó la atención que el queque se mantuvo húmedo tres días después de preparado. Lo guardé igual que siempre lo hago envuelto en papel plástico y conservó su humedad, algo que no suele ocurrir en los bizcochos sin gluten.
Receta:
1 taza de zanahoria rallada
1 taza de harina de arroz
1/3 taza de harina de maíz
3 cucharadas de maicena
2 cucharadas de almidón de tapioca o mandioca
3 cucharaditas de polvo de hornear sin gluten
1 a 1 1/2 taza de azúcar
1 cucharadita de ralladura de limón o naranja
1 cucharadita de canela
1/2 taza de aceite
1/2 taza de leche de coco (agregue más si queda muy espeso)
Preparación:
Precaliente el horno a 180 grados Celsius.
Engrase un molde.
Mezcle los ingredientes secos con los húmedos en un bowl.
Mezcle con una batidora hasta obtener una mezcla homogénea.
Ponga la mezcla en el molde engrasado.
Lleve al horno por 45 minutos, compruebe que esta bien cocido: al enterrar un palito debe salir seco.
Deje enfriar fuera del horno.
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